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Informe, Incendios Forestales 2001
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PRINCIPALES DEFINICIONES Y CONCEPTOS
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FUEGO:

Es el fenómeno que se produce cuando se le aplica calor a un material combustible, en presencia de aire. Una vez generado el fuego, es necesario que existan estos tres componentes (combustible, aire, calor) para que éste permanezca; es por ello que para controlar un incendio, debe buscarse acabar con por lo menos uno de los factores.

QUEMA:

Es el fuego que se propaga con o sin control y/o límite preestablecido, consumiendo combustibles como basuras, elementos de madera, pastos y otros residuos vegetales producidos en actividades agrícolas, pecuarias y forestales

CONATO:

Es el fuego que se propaga sin control y sin límite preestablecido, cuyo tamaño oscila entre 0 y 0.5 hectáreas (ha.) y presenta relativamente poca dificultad para su control.

INCENDIO FORESTAL:

Es el fuego que se propaga sin control y sin límites preestablecidos, consumiendo material vegetal ubicado en áreas rurales de aptitud forestal o, en aquellas que sin serlo, cumplan una función ambiental. Su tamaño es superior a 0.5 ha..

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CLASIFICACIÓN DE LOS INCENDIOS FORESTALES

Los incendios forestales pueden ser de tres clases:

  • SUPERFICIALES: Son aquellos que se suceden a ras del suelo, a una altura de más o menos 1.50 cm; estos incendios queman la hierba, los pastos, los matorrales, los arbustos y demás vegetación menor.
  • DE COPA: Son aquellos cuyas llamas se trasladan de copa en copa de los árboles, quemándolos y provocando su muerte.
  • SUBTERRÁNEOS: Son aquellos que se propagan por debajo del suelo, quemando raíces, microorganismos y materia orgánica.

FACILIDAD DE CONTROL:

La facilidad de controlar un incendio forestal está ligada a:

  • Tamaño: Se considera que un área incendiada menor de 0.5 ha. es relativamente fácil de controlar.
  • Combustible: Por combustible forestal se entiende cualquier material de origen vegetal (árboles, arbustos, hierbas, ramas, troncos y raíces, entre otros) vivo o muerto que pueda entrar en combustión al aplicarle calor. Dependiendo de la proporción de celulosa, lignina, aceites y resinas que posea la madera, será más sencillo o más complejo combatir el fuego.
  • Características del lugar: El acceso del personal que acude a combatir el incendio se dificulta o facilita entre otras por la pendiente y la cantidad, estado y tipo de vías existentes.

CAUSAS DE LOS INCENDIOS FORESTALES:

En el siguiente cuadro se encuentran las principales causas de los incendios forestales y los agentes que los producen:

CAUSA DE INCENDIOS FORESTALES

AGENTES

Naturales

Sequías - Humedad Relativa

Vientos

Temperatura

Morfología del Terreno

Inflamabilidad de las especies

Rayos

Veranos prolongados

Arrastre de materiales encendidos

Calor constante

Pendientes mayores de 45º

Especies resinosas

Tormentas eléctricas en bosques expuestos

Socioculturales

Formas de tenencia y uso del suelo

Cinturones de miseria

Vandalismo

Mecanismos de distracción a las autoridades

Limitación de uso por áreas de protección

Areas densamente pobladas

Conflictos sociales y políticos

Prácticas agropecuarias tradicionales

Piromancia

Areas de turismo

Curiosidad

Rituales

Quemas para cambiar vocación productiva del suelo

Venganza contra dueños o administradores

Sabotaje, presión, represalias

Quemar para liberar terrenos

Quemar para presionar reformas

Luchas partidarias

Prácticas ancestrales

Por el vértigo de ver el fuego

Fogatas mal usadas, fumadores, quemas de basuras

Por ver que pasa con un matorral

Lecturas del fuego, sanaciones, ofrendas, exorcismo

Técnicas

Imprudencias, descuidos o accidentes

Prácticas silvícolas inadecuadas

Conatos mal controlados

Líneas eléctricas

Oleoductos, gasoductos y otros

Fumadores y hogueras

Incineración de basuras

Maniobras militares

 

Mal uso de instrumentos

Quemas sin control

Explosiones, cortos

Transeúntes fumadores, pirómanos

Atentados, accidentes

Cerillos, colillas

Quemas de basuras sin medidas adecuadas

Prácticas militares

EFECTOS DE LOS INCENDIOS FORESTALES:

Los incendios forestales son una de las principales causas de:

  • La pérdida de especies de fauna y flora y por ende, de la biodiversidad.
  • Migración de la fauna silvestre.
  • La contaminación del agua y el aire.
  • La degradación de los suelos, aumentando la escorrentía y el potencial de erosión; de esta forma también se incrementan las situaciones de emergencia por la ocurrencia de deslizamientos, avalanchas e inundaciones.
  • Afecciones respiratorias en los habitantes del sector.

Incendios de alta intensidad y duración e incendios repetidos reducen la materia orgánica, provocan cambios en la estructura de las arcillas y afectan de manera desfavorable la porosidad, la aireación y la capacidad de infiltración del suelo (Díaz, 1991).

La oxidación de la materia orgánica por el fuego produce una rápida liberación de nutrientes en forma de cenizas, muchos de los cuales pueden perderse del sitio si después del incendio ocurre una lluvia. El nitrógeno depositado en la materia orgánica se volatiliza durante la combustión, lo que implica grandes remociones del área. El nitrógeno mineralizado o asimilable, en cambio, se incrementa después del incendio en virtud de aumentos en la fijación de nitrógeno. Después de los incendios se incrementa la cantidad de formas solubles en agua, del fósforo y el potasio y se estimula la actividad microbiana a causa de reducciones de la acidez en las partes superiores del suelo e incrementos de la temperatura.

Desde el punto de vista atmosférico, las emisiones producidas por los incendios contienen principalmente CO2 y en menor cuantía oligogases y aerosoles, los que incorporados en los más altos niveles de la atmósfera, son distribuidos por todo el planeta.

FACTORES QUE FAVORECEN LOS INCENDIOS FORESTALES

Se consideran factores que favorecen los incendios, aquellos elementos o eventos que en virtud de sus propiedades o potencialidades facilitan la iniciación o desarrollo de los incendios. La ocurrencia de incendios forestales está determinada por la presencia de factores de índole climático, sociocultural y silvicultural.

CONDICIONES CLIMÁTICAS EXTREMAS

  • Temperatura: La temperatura no es más que el resultado de la radiación solar y de los movimientos de la atmósfera en un punto determinado. Se debe tener presente que a medida que aumenta la temperatura, disminuye la longitud de onda y se incrementa la radiación. De ahí, entonces, que aumentos de 10 veces en la temperatura se traducen en incrementos de 10000 veces en la radiación.
  • Precipitación: Una precipitación anual adecuada pero mal distribuida, del orden de 1000 a 2000 mm, y altas temperaturas favorecen en gran medida la ocurrencia de incendios. A medida que disminuye la lluvia y aumenta la temperatura, se incrementa el riesgo. La combinación de temperatura y precipitación interactuando con la vegetación, determinan para cualquier localidad sus condiciones de humedad al nivel de suelo. Estas condiciones de humedad propician la presencia de combustibles vegetales vivos con mayor o menor grado de inflamabilidad.
  • Humedad en el aire: El aire seco es aquel que no está saturado, mientras que el aire húmedo está saturado. Cuanto más caliente está el aire (mayor temperatura) absorbe más humedad y cuanto más frío está, admite menos humedad. Para denotar el estado de humedad del aire se utiliza la humedad relativa. Los valores críticos de humedad relativa son importantes en el caso de incendios, porque pueden favorecer no sólo la iniciación sino también su propagación. Bajos valores de humedad relativa se presentan cuando las temperaturas son altas; bajo estas condiciones la probabilidad de ocurrencia de incendios es más elevada. De ahí que en zonas de tierras bajas y secas, durante el mediodía, la humedad relativa es mínima y la posibilidad de ocurrencia de incendios es máxima.
  • Deficiencia Hídrica: La deficiencia hídrica está más relacionada con la disponibilidad de agua a nivel del suelo. Esta condición de humedad del suelo no es más que la resultante de la combinación de la temperatura y la precipitación de cada sitio, interactuando con su vegetación.
  • Vientos: Los vientos costeros y de valle pueden actuar como cómplices en la propagación de un incendio, debido principalmente a su persistencia más que a su velocidad. Durante la mañana los vientos suelen soplar del valle a la cima de la montaña, ladera arriba, favoreciendo el ascenso, la extensión de las llamas y el fuego de copas. En la tarde el sentido cambia, frenando algo la zona ya incendiada. Ahora bien, si el incendio rebasa la cumbre, se disiparía la propagación del fuego hacia abajo por las laderas de sotavento.

ASPECTOS SOCIOCULTURALES

En Colombia, más del 90% de los incendios forestales son ocasionadas por el hombre. Algunos aspectos relacionados son los siguientes:

  • Uso de la tierra: Este factor tiene gran incidencia en el riesgo de incendio, pues dependiendo del cultivo que se siembre en zonas aledañas a las plantaciones, las prácticas de manejo pueden incluir quemas.
  • Red vial: Desde el punto de vista de control de incendios, las vías se constituyen en una de las principales herramientas que permiten el acceso a la zona para realizar tareas de control, a la vez que pueden actuar como cortafuego. Sin embargo, las vías de frecuente tránsito, aledañas a las áreas de reforestación, se convierten en zonas de alto riesgo para la ocurrencia de incendios.
  • Turismo: Las plantaciones forestales o las zonas aledañas a éstas en las cuales se permiten actividades recreativas, tienen un alto riesgo, por fogatas y fumadores, entre otros.
  • Concentración de población: Los núcleos de población cercanos a áreas forestales tienen mayor probabilidad de presentar incendios, principalmente en días festivos y en la época navideña por la quema de pólvora o globos. Los cinturones de miseria inciden en la medida en que demandan del bosque algunos recursos como leña y ejercen presión sobre la tierra para cultivar.

ASPECTOS SILVICULTURALES

El grado de inflamabilidad varía en las diferentes especies vegetales; ello depende de:

  • Estado y peso: Los combustibles por su estado se dividen en vivos y muertos (tienen mayor inflamabilidad los muertos que los vivos). Por su peso, se dividen en ligeros (ramillas, hierbas, hojarasca), medianos (ramas) y pesados (ramas gruesas y troncos). Los combustibles ligeros arden más fácilmente que los pesados, y en ellos también se propaga más rápidamente el fuego; sin embargo, en los pesados la intensidad del incendio es mayor, pues tienen mayor biomasa para la combustión.
  • Tamaño: Conforme el combustible es más pequeño, tiende a arder más fácilmente porque por cada unidad de su volumen tendrá una mayor superficie de contacto con las llamas, lo que le hará perder más rápidamente la humedad y alcanzar más pronto la temperatura a la que puede arder (350º C, aproximadamente, en varias maderas).
  • Densidad: A partir de contenidos de humedad iguales, las maderas densas tardan más en arder, pero lo hacen con mayor intensidad que las maderas menos densas, como las de muchos pinos, aunque estas últimas arden con mayores llamas, debido a la presencia de resinas.
  • Contenido de Humedad: A menor contenido de humedad más fácilmente se inicia la combustión y más fácilmente se propaga el fuego.
  • Presencia de sustancias inflamables: Las resinas de las coníferas y las gomas de las latifoliadas favorecen la combustión. Este es uno de los factores que contribuye a una rápida propagación de aire y llamas en matorrales.
  • Compactación: A medida que los combustibles están más compactados, el aire circula con menos libertad entre ellos, lo que merma la cantidad de oxígeno y dificulta su combustión.
  • Continuidad horizontal: Cuando los combustibles son continuos horizontalmente, el fuego se propaga mejor en comparación a cuando existen manchones sin vegetación.
  • Continuidad vertical: Implica "puentes" que comunican a los combustibles superficiales con las copas de los árboles, aumentando la probabilidad de que se produzcan incendios de copas.
  • Altura: Acorde con su ubicación por altura, convencionalmente los combustibles se clasifican en subterráneos, superficiales y aéreos. Los subterráneos, son todos aquellos que se encuentran bajo la superficie del suelo, como raíces; los superficiales, son todos los que se encuentran desde la superficie del suelo hasta 1.5 m de altura, tales como hojarascas, ramillas, ramas, renuevos, arbustos, troncos caídos etc.; Los aéreos, son los que se encuentran desde 1.5 m de altura en adelante: árboles enteros jóvenes y maduros, vivos o muertos.

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